
Unas 200 personas llegadas de varios puntos de España participaron en la inauguración, el 20 de septiembre de 2024, de la Fundación Educativa CMT. El evento, celebrado en el Centro Arrupe de Valencia, supuso la puesta de largo de esta nueva institución que a partir de ahora asume la titularidad de los doce centros educativos que las Carmelitas Misioneras Teresianas tienen en Cataluña, la Comunidad Valenciana y el País Vasco.
Equipos directivos de los colegios, miembros de los claustros, colaboradores y amigos acompañaron a las hermanas Carmelitas Misioneras Teresianas y al patronato de la Fundación en este día en el que “se actualiza el sueño de nuestro fundador, el Padre Francisco Palau”, tal y como lo expresó María José Gay, animadora general de las CMT.
“Nuestra congregación –explicó– surge de la combinación del doble servicio: la educación y la asistencia. Hoy queremos seguir respondiendo a los desafíos actuales de la sociedad, ser escuela evangelizadora y espacio de comunión. Y creo que el P. Palau podría decirnos hoy: admiro en vosotras la creación de esta Fundación Educativa CMT”.
“Nos disponemos a seguir caminando con un mismo horizonte, la obra es de Dios y nosotras somos sus instrumentos”, añadió.
“Gracias por esta decisión”
Vicenta Rodríguez, secretaria autonómica de Escuelas Católicas Comunidad Valenciana, aplaudió la constitución de esta Fundación, máxime en un momento de dificultad como el que atraviesa la educación concertada en España, según relató.
“Pero seguimos entregando la vida y llenando de esperanza los corazones de la comunidad educativa –animó–. Las religiosas CMT han tenido una mirada limpia y educadora en esta decisión de poner en marcha la Fundación, y hoy, en este día de bautizo, os doy las gracias porque con ella aseguráis el futuro de la labor evangelizadora de la Iglesia”.
También mostró su agradecimiento Francisco Sánchez, delegado diocesano de Educación de la Diócesis de Orihuela-Alicante. “Es un acto de valentía –aseguró– en los tiempos que corren la creación y puesta en marcha de esta Fundación. La unión de los colegios con las entidades que nos aglutinan es fundamental para tener una voz, que se nos escuche y seamos importantes”.
El director de la Fundación Edelvives, Juan Pedro Castellano, pronunció un discurso más emocional, al señalar que “es un proceso de enamoramiento el que hemos expresado desde la Fundación Edelvives al acompañaros. Estamos invitados a soñar, como vuestro fundador, que cuanto más lo leo, más me enamoro”.
Garantizar el sueño del P. Palau
En nombre del patronato de la Fundación Educativa CMT, primero tomó la palabra su presidenta, Teresa Vives: “Siento un gran gozo al compartir con vosotros los inicios de un gran proyecto. La mirada atenta a los signos de los tiempos, con visión de futuro, nos obliga a repensarnos, pero también a mantener siempre vivas nuestras fuentes. Hoy tenemos un recuerdo agradecido para todas las generaciones de hermanas que han sido capaces de adaptarse a la vida y crear la red de centros que hoy forman parte de la Fundación”.
Teresa Vives habló agradeció también el trabajo de los equipos directivos, profesorado, familias y alumnos, y a todos dirigió un mensaje: “Parafraseando al P. Palau: marchemos siempre, siempre adelante, hasta llegar a ser semejanza e imagen de Dios. Adelante siempre”.
Habló por último Francisco Menargues, vocal del patronato: “Como dice el papa Francisco, la educación es un acto de amor, y es exigente, porque pide los mejores recursos para caminar con los jóvenes. La Fundación Educativa CMT es la herramienta para adaptarnos a las nuevas exigencias y asegurar la viabilidad de la obra del P. Palau: estrechar lazos entre las religiosas y los laicos, mantener la viabilidad y sostenibilidad de los centros, afianzar la continuidad de los centros y asegurar a los alumnos la garantía de su educación. Es su futuro, la tranquilidad de sus familias y nuestra promesa”.
Celebración entre amigos
El acto de inauguración fue amenizado por dos actividades que permitieron disfrutar del talento que hay en los centros educativos CMT. Por una parte, el Coro Nuestra Señora del Carmen del Colegio de Crevillente, dirigido por Joaquín Fuentes y compuesto por más de cuarenta voces infantiles y juveniles, que interpretó varias piezas de su repertorio, que emocionaron al público.
Por otra, la Banda de Música del Colegio Sagrado Corazón de Amposta actuó durante el aperitivo ofrecido a los asistentes, momento de auténtico intercambio de felicitaciones y agradecimiento.